¿De dónde salió este tipo?
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Andrés Meirovich
Mucho se habla de lo difícil que es innovar en Chile, que no existe ciencia aplicada y que uno tiene que ir a mercados desarrollados para encontrar ejemplos exitosos de soluciones con impacto. Pero no es así.
Hace unos días tuve la oportunidad de visitar junto a la Presidenta de la República, parlamentarios de la Quinta Región y Corfo, el Advanced Innovation Center (AIC) que dirige Alfredo Zolezzi en Viña del Mar. La sensación generalizada es que estábamos al frente de algo de nivel mundial y que es muy poco conocido por la opinión pública.
Dentro de las tecnologias desarrolladas por AIC, destaca el Plasma Water Sanitation System (PWSS), innovador método de tratamiento de agua capaz de eliminar el 100% de virus y bacterias en un flujo continuo de agua contaminada; el Reservoir Management System (RMS), una tecnología que permite extender la vida útil de pozos petroleros agotados, sin uso de solventes ni agua, revalorizando activos petroleros y Aplicaciones de Superconductividad que permitirían proponer una nueva forma de abordar la minería extractiva. Estas registran importantes avances y tienen el potencial de transformar varias industrias a nivel global y desde Chile.
Quise destacar este ejemplo, ya que a pesar de un ecosistema adverso, que dista mucho de sus pares desarrollados, Zolezzi y su equipo han podido innovar, crear soluciones únicas y competir con grandes centros científicos en el mundo. Hace unos meses, el Advanced Innovation Center fue elegido dentro de las 100 empresas más influyentes del mundo por la revista World Finance de Londres.
AIC opera con el Modelo de Innovación de los Objetivos Integrados (MOI), también desarrollado por Zolezzi, que ha probado su eficacia en cada uno de los desarrollos que ha ejecutado el centro. Ha llamado la atención no solo de medios de comunicación y centros de innovación del mundo, sino también de gobiernos que han visto en este modelo una herramienta única para transformar la innovación en un eje central de desarrollo.
Como país debemos ensalzar este tipo de iniciativas e incentivar para que privados crean y apuesten por apoyar estos emprendimientos, que si bien pueden tener un desarrollo lento y no exento de riesgos, son vitales para llevar a Chile al siguiente nivel dentro de la escalera de desarrollo.